Requisitos para acogerse a la Ley de Segunda Oportunidad:

La Ley de Segunda Oportunidad, un recurso legal vital para particulares y autónomos endeudados, abre la puerta a la cancelación o reestructuración de deudas. Al adentrarse en esta ley, el deudor en situación de insolvencia puede liberarse de compromisos financieros o establecer un plan de pagos acorde a su realidad económica.

¿Qué es la Ley de Segunda Oportunidad?

Esta legislación se sustenta en la premisa de que, para superar la crisis económica, España debe brindar soluciones equitativas a todos. Con la recesión afectando a diversos sectores, la necesidad de ofrecer respuestas prácticas a ciudadanos y empresas se volvió imperativa. La Ley de Segunda Oportunidad emerge como un mecanismo para contrarrestar los efectos del artículo 1911 del Código Civil. Este obliga al deudor a responder con todos sus bienes presentes y futuros.

Como resultado este enfoque proactivo busca no solo favorecer la economía, sino también preservar empleos y ofrecer a las personas físicas una oportunidad de sobreponerse a la insolvencia. Esto les permite reintegrarse al sistema financiero sin cargar deudas imposibles de saldar.

¿Cuáles son los requisitos para acogerse a la Ley de Segunda Oportunidad?

  1. Deudor de Buena Fe:
    • La buena fe del deudor, reflejada en un comportamiento honesto desde la generación de deudas hasta la declaración de insolvencia, es un requisito fundamental. Este principio obliga al deudor a intentar cumplir sus obligaciones y buscar soluciones antes de acogerse a la ley.
  2. Mínimo de dos deudas:
    • Es necesario tener deudas con al menos dos acreedores diferentes, que pueden ser entidades financieras, proveedores, Hacienda, Seguridad Social, entre otros.
  3. Que no haya existencia de condenas graves:
    • El deudor no debe haber sido condenado a prisión por delitos económicos, contra derechos laborales, o contra entidades públicas en los últimos 10 años. Se excluyen antecedentes de infracciones tributarias graves.
  4. Deudas generadas de buena Fe:
    • Las deudas deben haberse generado de manera honesta, evitando actitudes temerarias o negligentes por parte del deudor.
  5. Carencia de patrimonio suficiente:
    • El deudor debe demostrar su insolvencia, evidenciando la falta de recursos para cumplir con sus acreedores.
  6. Periodo de espera para nueva solicitud:
    • En casos de solicitudes repetidas, debe haber pasado al menos 10 años desde la última acogida a la ley. Si se estableció un plan de pagos, el plazo es de dos años.

¿Qué beneficios ofrece la Ley de Segunda Oportunidad?

La Ley de Segunda Oportunidad brinda dos opciones para el deudor:

  1. Liquidación de patrimonio:
    • Ofrece la cancelación total de deudas a cambio de liquidar el patrimonio del deudor.
  2. Plan de pagos protegiendo la vivienda:
    • Permite al deudor proteger la vivienda y bienes esenciales, estableciendo un plan de pagos fraccionado para parte de las deudas, con el compromiso de cancelarlas al final del plan.

¿Cómo iniciar el procedimiento de acceso a la Ley de Segunda Oportunidad?

El proceso judicial para acogerse a la Ley de Segunda Oportunidad implica la presentación de documentación que respalde las deudas e insolvencia. La asesoría de un abogado especializado es esencial para garantizar que todos los detalles se contemplen y orientar al deudor en este proceso legal crucial.